Mascotas, víctimas de un macabro negocio

Detrás de muchos cachorros existe una brutal realidad. Infórmate.

La avaricia y el dinero fácil es lo que mueve a las tiendas, importadores y macrocriaderos que venden perros del Este. Compran los cachorros por unos 50 o 60 euros, sin importarles que sean criados en auténticas granjas de explotación, que los padres estén esclavizados en condiciones deplorables, sin controles veterinarios, sin el más mínimo respeto por su salud, bienestar, ni por sus vidas. A las hembras se las encierra en jaulas donde enlazan una preñez con la siguiente. Se cruzan ejemplares de la misma familia (padres con hijos, hermanos)… Estos cachorros serán vendidos por cantidades que oscilan entre los 600 y 1.200 euros…

Se les separa de su madre a la edad de un mes, incluso antes. El traslado se realiza en camiones donde viajan apiñados en jaulas minúsculas, sin comida, ni agua y nadando entre sus propios excrementos y vómitos. Muchos de ellos mueren durante ese viaje de hambre, sed, frío/calor, extenuación, aplastados o de diversas enfermedades contraídas en las granjas. Los que logran sobrevivir, llegan en unas condiciones pésimas, enfermos, sin socializar (insuficiente contacto con madre, hermanos, personas… lo que nos asegura que serán perros problemáticos en el futuro), sin vacunar ya que son demasiado jóvenes para ello, lo que obliga a los que comercian con ellos a falsificar las cartillas veterinarias para poderlos vender… aún así, el beneficio económico es enorme.

Tras la ilusión e inversión inicial, el propietario se encuentra con que su cachorro en muchos casos no sobrevive a la primera semana juntos, las enfermedades adquiridas en las granjas e incubadas durante el transporte, finalmente se manifiestan en el nuevo hogar. Fiebres, diarreas, vómitos, debilidad, apatía…  El dueño preocupado habla con el vendedor y éste en su alarde de «gran corazón» ofrece sustituir el cachorro por otro «nuevo» como si fuese un electrodoméstico o mueble cualquiera. Saben que el perro no va a sobrevivir, pero no importa porque aún entregando otro cachorro (que viene del mismo lugar, por supuesto) sigue siendo un negocio redondo y altamente rentable. El dueño, ya enamorado de su pequeño cachorro, rara vez acepta ese cambio, así que pasados menos de diez días de la compra acaba quedándose sin cachorro, sin dinero y con el corazón roto. Los que superan esta fase, entran en la siguiente, en los meses posteriores a la compra, perros que aparentemente estaban sanos, comenzarán a manifestar síntomas de graves enfermedades hereditarias, como displasia o ceguera progresiva, que obligarán a sus dueños a afrontar los gastos de operaciones que suponen desembolsos elevadísimos, en algunos casos de 2.000 y 3.000 euros. Además, muchos de los chips y pedigris serán falsificaciones.

¡PAREMOS ESTO YA!

PAREMOS LA EXPLOTACIÓN, PAREMOS EL ABUSO, PAREMOS LA ESTAFA Y SOBRETODO….PAREMOS LOS CRÍMENES DE INOCENTES.

NO COMPRÉIS CACHORROS PROCEDENTES DE PAÍSES DEL ESTE, NI EN TIENDAS, NI MULTIRAZAS, NO APOYÉIS ESTA BARBARIE.

NO PENSÉIS QUE COMPRANDO UN CACHORRO DE ALLÍ LE HACÉIS UN FAVOR…TAL VEZ TENGA UNA OPORTUNIDAD, UNA ENTRE DIEZ DE SOBREVIVIR PERO NO OS ENGAÑÉIS….ESTARÉIS CONDENANDO A OTROS MUCHOS QUE OCUPARÁN SU LUGAR.

MIENTRAS HAYA NEGOCIO HABRÁ EXPLOTACIÓN: Mascotas, víctimas de un macabro negocio

virginiamillares@yahoo.es – Teléfono: 639 35 35 11